Al igual que me ocurre con Haruki Murakami (y con algún otro escritor patrio), el primer día de la publicación de su nuevo libro, por ejemplo, 1Q84, que me presento en la librería nada más abrir las puertas, me ocurre con Pedro Almodóvar. En la primera sesión del primer día de estreno, allí estoy yo.
Además, no leo en la prensa, ni veo en la televisión, nada sobre la película. Me dejo arrastrar por lo que me da la pantalla del cine en cuanto se apagan las luces de la sala. Evidentemente, el tráiler no lo he visto hasta ahora. En general, los detesto.
No conocía a este hombre, tiene mandíbula de Borbón. Tuvieron una escena de sexo en el tren, ella, ¿con bragas y sujetador?, bueno, puede ser, pero resultó un tanto extraña.
La historia está contada a modo de flashback. El montaje es bueno, así que no hay problema de perderse. Agradezco cuando veo una película que no jueguen conmigo, no quiero que metan el dedo en la llaga para que toda la sala se ponga a llorar. Además, es lo que quería su director, acabo de leer una entrevista suya que dice eso, contención. No llorar delante de la cámara. A Julieta joven, solo le sale un moco cuando se entera de que.... Julieta adulta, ni moco cuando se entera que...
Pedro Almodóvar me da miles de vueltas sobre qué es cine, yo no sé nada a su lado. Él hizo su película tal como quiso, pero después de 96 minutos que dura el film, me faltaba algo. Y creo que era eso, la manifestación del dolor, que es inevitable en un primer momento. Cuando crees que ya no puede haber nada más horrible, como si te clavaran un puñal en el corazón y que alguien te está apretando la garganta, y que no puedes respirar. Tienes que gritar y llorar. El tiempo suaviza el dolor, lo transforma, al menos, te puedes contener en público y no lloras. Estos sentimientos (más o menos) me los contaba la madre de una amiga cuando creyó que había perdido a su hija.
Todo lo que quiso anular de la historia, o todo lo que anuló, lo eché de menos. Es un poco de insatisfacción cuando termina la película y comienza a cantar Chavela Vargas, ni siquiera este final redime la historia, que a estas alturas necesitamos algo más, con tanto cine a nuestra disposición, que a determinados genios del cine siempre les exigimos más.
La andaluza llena de luz y color
La gallega, triste, fea, resentida.
Al inicio de la película los cameos de Bimba Bosé, David Delfín y Charlie Centa. También el de Agustín Almodóvar, pero de éste no encontré fotografía.
La colocación de la cámara, fotografía, banda sonora (Alberto Iglesias)..., estupendo
Muy pocos momentos de expresividad nos dedicó Emma Suárez. Contención, debió de ser la palabra mágica en el set de rodaje. Creo que es la primera vez que le puedo poner un pero a esta actriz, pero, por supuesto, ella siguió las directrices del director.
Pedro Almodóvar
Esta fotografía me gusta mucho. Es de Sergio González, supongo que se la hizo con ocasión de la entrevista a que hago referencia arriba.
Reparto:
Emma Suárez,
Adriana Ugarte,
Daniel Grao,
Inma Cuesta,
Darío Grandinetti,
Rossy de Palma,
Michelle Jenner,
Pilar Castro,
Susi Sánchez,
Joaquín Notario,
Nathalie Poza,
Mariam Bachir,
Blanca Parés,
Priscilla Delgado,
Sara Jiménez,
Tomás del Estal,
Agustín Almodóvar,
Bimba Bosé
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